La policía mauritana desarticula una red asiática de tráfico de personas que organizaba un viaje migratorio irregular a Canarias

El hombre daba clases particulares de idiomas a dos hermanos, informando la niña de ocho años a sus padres que el profesor abusaba sexualmente de ella.

Se trata de tres proyectiles antiaéreos, todos cargados de explosivo y con espoletas intactas.

El perjudicado recriminó a un joven por proferir insultos y gestos obscenos a varias chicas que estaban por la zona.

Se incautaron un total de 650 gramos de cocaína, 1.585 gramos de hachís, 4.700 euros en efectivo, ocho básculas de precisión, y útiles de preparación y distribución de las sustancias.

El individuo fue localizado en los alrededores de su vivienda, ubicada en el barrio teldense de Las Remudas, y detenido una vez comprobado que portaba hachís en el interior de su aparato digestivo.

El arrestado estacionaba su vehículo en las inmediaciones del centro a la espera de que los jóvenes se acercasen para adquirir la droga.

El detenido vendía, presuntamente, desde el inmueble en el que residía heroína y crack a numerosos individuos que hasta allí acudían. En los registros practicados fueron incautadas 625 dosis de crack, 470 dosis de heroína y 65 gramos de cocaína.

Cuando la guagua se encontraba detenida en una parada del parque Arnao, la mujer accedió a la misma y al grito de "ahí tienes, hijo de puta" roció la cara del empleado con ácido acético.

Diversos testigos ubicaron al mismo individuo y a su vehículo en los escenarios de otros cuatro robos, cometidos en Tamaraceite, La Milagrosa y El Román.

La recuperación se produjo en el puerto de Las Palmas, antes de ser exportados a África. Los turismos habían sido sustraídos en Dinamarca.

Las víctimas se percataron de lo sucedido e inmediatamente pusieron los hechos en conocimiento de la Policía Nacional. Los agentes detuvieron al presunto autor con los objetos denunciados como sustraídos.

Los sospechosos accedieron al local por la fuerza y se llevaron la caja fuerte.